Mi padre es muy aficionado a recoger caracoles en el campo. Cuando ha llovio suele salir porque dice que se encuentran mucho mejor. El caso es que un día trajo una bolsa bastante grande de caracoles, pero se le debió quedar abierta y uno se escapó. El muy revoltoso se fijó en la lechuga, verde, verde que tenía mi madre encima de la mesa. La mesa está a una altura del suelo de unos 120 centímetros. Voy a ponerte a prueba. Si el caraco, que es muy lento, sube todos los días 30 centímetros, pero por la noche cuando se duerme se resbala, y baja 20 centímetros. ¿Cuántos días tardará en llegar hasta la lechuga?
Si andas bien de matemáticas no vas a tener problema alguno en dar con la solución, pero ten cuidado que tampoco es tan de cajón como puede parecer.